- El primero consistió en la agresión del hijo hacia la madre motivado por una conducta agresiva habitual del detenido.
- Pocas horas después otra UTE procedió a la detención de las dos partes implicadas tras un episodio de agresión mutua.
El pasado día 15 de diciembre las unidades territoriales de Policía Local atendieron dos casos de agresiones en el ámbito familiar, separadas en el tiempo por un escaso margen.
En torno a las 19:15 horas fueron requeridos por la madre del finalmente detenido, que al llegar a casa del trabajo encontró a éste con un amigo. Al recriminar el estado de limpieza de la casa se inició una discusión que, según manifestación de la denunciante, derivó en patadas al mobiliario y posteriormente agarrarla de la muñeca, que le torció, continuando con la cara, en un forcejeo que le supuso lesiones en esta y en el cuello. Al parecer, tuvo que ser el propio amigo del implicado el que los separase, tras lo cual el agresor abandonó el lugar. Interesada la patrulla por conocer de denuncias anteriores, la agredida indica que no existen, si bien hay varias agresiones previas contra ella y su hermana pequeña de corta edad, refiriendo habituales sustracciones de dinero. Contactando con el hijo, mayor de edad, se le explica lo sucedido y de la conveniencia de presentarse en dependencias policiales, a lo cual accede, siendo informado de sus derechos y detenido para declaración.
Sobre las 21:40 horas se produjo otro requerimiento por parte de una mujer que refería una agresión por parte de su pareja. Personada la patrulla en el lugar se entrevistó reservadamente con cada una de las partes, coincidiendo en el hecho de haberse enzarzado en una pelea en la que una parte aludía a los celos tras regresar de una comida de empresa y la llamante manifestaba que el origen fue el estado de embriaguez de su pareja. A la vista de ambas declaraciones, así como detalles de la misma y lesiones presentadas, se procedió a la detención de ambos.