La concentración se ha llevado a cabo en la Plaça de Baix. Ha participado el alcalde, Carlos González, el concejal de Igualdad, Mariano Valera, así como miembros del Equipo de Gobierno y de la Corporación Municipal
El movimiento feminista ha llevado a cabo una convocatoria de “urgencia” en diferentes ciudades de toda España tras el repunte de asesinatos machistas y el hallazgo del cuerpo sin vida de la pequeña Olivia en la costa canaria.
El Ayuntamiento de Elche se ha sumado a la concentración y ha guardado un minuto de silencio para mostrar rechazo a esta lacra que eleva a 19 mujeres y tres menores el número de víctimas mortales en lo que va de 2021. La manifestación se ha realizado en la Plaça de Baix, y participaron el alcalde, Carlos González, el concejal de Igualdad, Mariano Valera, además de varios miembros del Equipo de Gobierno y de la Corporación Municipal.
La acción, promovida por la Coordinadora Feminista de Elche a través de las redes sociales, ha reunido a cerca de 250 personas, con las medidas de distanciamiento pertinentes.
La acción, promovida por la Coordinadora Feminista de Elche a través de las redes sociales, ha reunido a cerca de 250 personas que han cumplido con las medidas de distanciamiento pertinentes
Una de las representantes de la Coordinadora ha leído el manifiesto en el que se condena la violencia vicaria. Aunque todavía es poco conocida socialmente, se trata del maltrato a las mujeres llevado al extremo, la más dolorosa. Consiste en dañar a la madre a través de sus propios hijos.
Como en el caso de Tenerife, donde se ha hallado en una bolsa en el mar el cadáver de Olivia, una de las dos niñas raptadas por su padre.
A este crimen se suma el asesinato de Rocío Caíz, la menor de 17 años desaparecida el pasado jueves en Martín de la Jara (Sevilla), a manos de su ex novio y padre del bebé de cuatro meses de la pareja, que ha reconocido que la mató, la descuartizó y esparció sus restos en distintos puntos de la localidad sevillana de Estepa.
La Policía Nacional ha concluido también que el caso de Elena Livigni, la joven arrojada por un balcón en Ibiza, fue un asesinato machista.