Se custodian más de cien cabeceras con un primer ejemplar local, el número 6 de El Agorero, editado el 22 de septiembre de 1836 en la imprenta de T. Martínez en Alicante (la primera imprenta en Elche, el Establecimiento Tipográfico de Matías Santamaría, no se abriría en Elche hasta mayo de 1841).

Además de la prensa local, la sección de Prensa Histórica también incluye prensa nacional desde principios del siglo XIX, por ejemplo, del periódico El Conciso (llamado así por su corta extensión –ocho páginas– y su reducido formato). Nacido en Cádiz en 1810, La biblioteca conserva varios ejemplares de su segunda época (editado en Madrid en 1814). Además, se conservan números de diversas publicaciones provinciales como Figaro, El Graduador, El Agrario, etc., publicados en Alicante. Y también periódicos regionales y nacionales como La Campana de Gracia, El Federalista, La Ilustración española y americana, El Liberal, El Imparcial… y algún número suelto de cabeceras bastante llamativas, como un número de The Kon Leche (29 de octubre de 1898), semanario satírico publicado en Manila cuando Filipinas todavía era colonia española.

Buena parte de este fondo forma parte del legado de Pedro Ibarra. Muchos de los periódicos que se conservan llevan su sello personal y, aunque la mayoría son de ámbito local, la colección incluye además rotativos de ámbito provincial y nacional, como los que hemos citado más arriba, en ocasiones recortes con artículos sobre temas de Elche.

Respecto a la prensa local, las dos últimas décadas del siglo XIX señalan el inicio de un período de expansión, favorecido por la liberal Ley de Policía de Imprenta de 1883. Hasta el final de la Guerra Civil, la prensa constituyó un acicate de la vida local, asumiendo un papel crítico en la vida pública de la ciudad. Entre 1836 y 1936 se habían editado en la ciudad sesenta y siete periódicos, recordaba un artículo de la revista Gaceta Ilicitana (20 de junio de 1964), aunque el cronista olvidaba reseñar ciertas cabeceras, como el periódico El Obrero. Órgano del Partido Socialista y de las Sociedades Obreras o el anarquista Cultura y acción. Portavoz del sindicato de trabajadores de Elche y su radio. Defensor de los intereses generales proletarios, cuyo número uno se publicó el 7 de diciembre de 1930.

El profesor Miguel Ors Montenegro, que ha estudiado la historia de la prensa ilicitana, señala la importancia de la prensa política y de opinión, pero también la significativa presencia de prensa literaria y cultural en el periodo señalado, y afirma que hasta 1939 “las diferentes publicaciones ejercieron el papel de auténticos defensores del pueblo, de la moralidad administrativa, del trabajo dentro de unas mínimas condiciones, del quehacer en torno al progreso cultural y social de la ciudad y, en definitiva, aportando un considerable esfuerzo —al de escribir hay que añadir el de crear «empresas» periodísticas casi siempre deficitarias—, en aras del mejor funcionamiento de la ciudad… Después de la guerra civil, esa importante tradición se iría perdiendo quedando tan sólo vestigios promovidos casi siempre por hombres que ya habían participado en experiencias similares anteriores. Con el tiempo, los diarios de carácter provincial tomarían el relevo, juntamente a algunos intentos desde la propia ciudad que no llegarían a cuajar. Un nuevo periodismo caracterizado por una mayor profesionalidad, pero también con una carencia importante de espíritu crítico.” (Ors, 1981: 16).

Ors también señala que muchos de los periódicos editados en Elche hasta el final de la Guerra Civil eran propiedad de una sola persona de la que, por tanto, dependería la ideología de la publicación.

A comienzos del siglo XX aparece el primer semanario socialista, Justicia (22/10/1904-17/06/1905), que, pese a su corta vida, es el primer exponente de una prensa de larga tradición en la población, siendo continuado por Trabajo (1908-1924) y El Obrero (1925-1938).

Al lado contrario, La Defensa (1911-1931) fue la publicación conservadora por excelencia, con una primera etapa como órgano del carlismo y voz del tradicionalismo ilicitano, Miguel Ors señala su transformación a favor del régimen surgido del golpe de estado de Primo de Rivera, el 13 de septiembre de 1923.

De otras ideologías políticas, podemos señalar el anarquista Liberación (01/05/1912-30/11/1912), el comunista Elche Rojo (1936-1939) o el partidario del Partido Radical ¡Ande el movimiento! (1908-1911). Un intento de prensa exclusivamente femenina, La Voz femenina, de ideología socialista, solo publicó un único número (01/05/1912).

La prensa cultural y literaria tiene su primera manifestación con Nueva Illice (1913-1927). También destacaría Levante (1925-1927), que se fusionaría con la anterior para dar lugar al semanario Elche (1927-1933). Otra publicación cultural destacable fue Amanecer (1925-1931), órgano de la Sección Literaria del Coro Clavé.

Terminada la Guerra Civil, el panorama de la prensa ilicitana se retrae extraordinariamente, con la total desaparición de la prensa política. Por lo que se refiere a la prensa cultural, no tiene nada que ver con lo publicado antes de la contienda. Las publicaciones escasean y solo se puede destacar la publicación anual Festa d’Elig (1942-). Su contenido es exclusivamente literario hasta los años sesenta del siglo XX, para transformarse por esos años en una revista turística. Actualmente, se sigue publicando por el Ayuntamiento de Elche con la denominación Festa d’Elx y está especializada en estudios sobre el drama ilicitano y de historia local.

A partir de los años cuarenta del siglo pasado, por otra parte, serán los periódicos provinciales de Alicante y Murcia los que se ocupen de la información sobre Elche, al margen de algunos intentos locales, más o menos duraderos, como Bilitri (1943-1944), Gaceta Ilicitana (1963-1964) o Elche (1969-1973), entre otros.

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